Cuando nos amamos y respetamos, podemos confiar en que pase lo que pase, siempre nos tendremos a nosotras mismas. Por eso es que el autocuidado es el primer paso para sentirte más segura y de paso, combatir la ansiedad y estrés.
Para conseguirlo hay diversas técnicas que podemos aplicar en nuestro día a día, y que una vez que convirtamos en hábito, pueden cambiar por completo la actitud con que nos paramos ante el mundo. ¡Adiós inseguridad, bienvenido amor propio!
1. Respira y relájate
Cuando estés frente a una situación que te inseguriza y paraliza, lo mejor para recuperar la calma es respirar conscientemente. Date unos momentos para hacer algunas respiraciones lentas y profundas, evita pensar, solo conéctate con tu cuerpo. Ese ejercicio cambiará tu frecuencia de inmediato.
2. Escribe tus cualidades positivas
Poner en palabras lo positivo que ves en ti es una excelente técnica para que te hagas consciente de ello, reforzar tu autoestima y ayudar a reencontrarte contigo. Cuando reconoces tus cualidades, es mucho más probable que te sientas merecedora de ellas.
3. Háblate con amor
Aunque reconocer tus errores y debilidades es bueno, ser tan dura contigo NO lo es. Háblate con respeto y siempre desde el amor, sé compasiva y elimina los malos hábitos de criticarte constantemente y de quitarte valor. Tu eres MÁS que suficiente.
4. Ojo con tu alimentación
Lo que comes afecta mucho tus emociones y conductas, por eso es importante que nutras tu cuerpo con amor y consciencia. Para mantener tu sistema nervioso en equilibrio, privilegia alimentos ricos en vitaminas y minerales, y mantén limitados los productos refinados y ricos en azúcar.
5. Identifica tus inseguridades
Reconocer aquello que te provoca inseguridad, miedo o ansiedad es el primer paso para combatirlo. Date el tiempo de analizarte y observar lo que te ocurre desde una mirada reflexiva y constructiva. ¿Qué te inseguriza? ¿Qué gatilla esa situación? ¿Cómo puedes cambiarla?
6. Trabaja en tus afirmaciones positivas
Cambia los pensamientos negativos que afectan tu autoestima y te limitan por afirmaciones positivas que te permitan avanzar. Repítalas en tu cabeza, en voz alta o escríbelas, pero haz de ellas un hábito hasta que lo positivo se convierta en la norma y lo negativo en la excepción, NO al revés.
7. Enfrenta tus miedos
La mejor forma de combatir un miedo es haciéndole frente; no se trata de sacarlos de tu vida, sino que dialogar con ellos y que no te paralicen. Saca toda tu fuerza interior y demuéstrate que eres capaz de enfrentarlos, entenderlos y aceptarlos.
8. Rodéate de buena energía
Aléjate de personas o situaciones tóxicas que no te potencian, y rodéate de gente inspiradora que te motive a ser mejor. Proyecta la energía que quieres recibir practicando la gratitud, empatía y amor propio. Si cuidas tu campo energético estarás cuidando cada paso que das en la vida.
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