10 Maravillosos Consejos para una Vida más Plena ❥

Salir conscientemente de las zonas de confort no resulta nada fácil, pero la verdad es que son precisamente los momentos más desafiantes y sobre todo, las nuevas experiencias, lo que nos entrega los grandes aprendizajes en la vida.

La exploración de nuevos mundos personales puede ser altamente positiva para que nuestra vida sea realmente feliz y nos sintamos realizadas. Y por supuesto y como ya puedes imaginarte, una vida más plena y consciente no dice relación con lo material o los bienes personales. Y ese es el gran problema… Erróneamente asociamos una vida más plena a una vida sin “problemas”, con éxito laboral, la pareja o el matrimonio perfecto o con el dinero suficiente para disfrutar de “una buena vida”, y por supuesto desde este estado de “confusión”, paradójicamente más nos alejamos de lo que verdaderamente importa.

No me considero una experta, pero de hecho y estoy segura que no importa cómo sea tu vida en estos momentos, da igual si tal vez consideras que no tienes una gran vida, pues sea como sea tu vida puede ser una vida plena ya que es algo que reside en ti y no en factores externos.

Acaso no te ha sorprendido ver cómo familias que viven en situación de carencia y pobreza o con algún familiar que padece una enfermedad o discapacidad importante, a pesar de todo esto, irradian alegría y gratitud por el sólo hecho de vivir y disfrutar con lo que tienen, más que de quejarse o ser infelices por lo que no poseen

Verás que todo depende más de la forma en que te enfrentas a los retos diarios que de las situaciones que vives.

Aquí les comparto maravillosos 10 consejos para acercarnos a vivir una vida más plena y por lo tanto más feliz.

1- Salir al mundo a mostrar quién eres tú realmente, no a que te vean. Esto es un cambio de paradigma total. Implica actuar desde adentro hacia afuera y no al revés. No amoldarte a los demás, sino actuar desde tu corazón.

2- Todo lo material que tengas, tenlo porque lo usas y te da placer, si no te da placer, bótalo, véndelo o regálalo. Es decir, no acumular objetos materiales que no uses y no tener simplemente por tener. También gozar las cosas, porque muchas veces nos quedamos en tener y tener los closets llenos, pero no usamos casi nada de lo que tenemos. Las cosas están para ser usadas y disfrutarlas.

3- Todo lo que sabes comunícalo. Guardar tus conocimientos y aprendizajes por timidez o por mezquindad, es algo que te aleja del camino a la felicidad y de descubrirte a ti mismo. El conocimiento es como una carrera de postas, pasa de una persona a otra. Si no lo compartes cortas el flujo.

4- Descubre lo que más te gusta hacer y hazlo, no para que te vean, si no para alumbrarle el camino a los demás.  Este es todo un tema, porque la mayoría de la gente ni siquiera sabe qué es lo que quiere hacer con su vida. Venimos a compartir a este mundo y nuestros dones son para ponerlos al servicio de los demás.

5- Haz las cosas que ames con disciplina. Si no tienes disciplina, no tienes amor por ti. Porque amar implica muchas veces renunciar a nuestra propia gratificación. Si no eres capaz de esforzarte por lo que te gusta hacer, entonces no lo amas realmente. El ser feliz también implica disciplina personal.

6- Las relaciones sanas de pareja implican permitirme ser y permitirle al otro ser. No controlar al otro para que actúe como yo quiero y tampoco permitirle al otro que me controle para que actué como él o ella quiera. Esto implica descubrir que es lo que realmente me importa y respetarlo.
Asimismo compartir momentos significativos con la familia y los amigos. Pertenecer a un grupo de acción social… En fin, la vida y parte del ser humano es “estar con otros”, en sociedad respetando nuestros tiempos de soledad, quietud y silencio.

7- Descubrirme a mí mismo, transformarme en lo que realmente soy. Esto implica ver lo que no me gusta de mí y aceptarlo. Ver mis patrones y mis comportamientos muchas veces no conscientes y hacerme responsable de ellos, dejando de culpar a los otros o a la situaciones externas de mi estado actual.

8- Expandirme, salir de lo conocido, familiar y seguro. Si siempre me quedo en lo conocido, en lo aprendido, no me permito conocer cosas nuevas.  Justamente en este explorar, voy abriéndome a nuevos puntos de vista y esto me permite descubrir quién soy realmente, que me inspira en la vida, más allá de lo conocido.

10- ¿Qué quiero dejar como huella en este mundo? Mi aporte a la sociedad, que contribución quiero hacer al mundo en el que vivo.

Y finalmente un consejo que sin duda es el más importante: Acércate a tu alma. Date tiempo para estar contigo mismo y busca la respuesta a las preguntas espirituales ¿Quién soy yo? ¿Qué hago acá? Deja tiempo para la espiritualidad en la vida, para la conexión interior. Esto te permitirá entender que todos somos parte de un mismo rompecabezas y todas las piezas son necesarias.

Muy buen comienzo de semana! ❥