Culottes, cropped flared, “palazzos más cortos” o pantalones anchos al tobillo… Todas las opciones son válidas a la hora de querer hacer mención a estos pantalones que a pesar de no tener “tan buena fama” porque aparentemente son difíciles de usar, déjenme decirles que bien combinados son mucho más favorecedores de lo que pueden creer.
Lo importante aquí es cómo llevarlos. Y con esto refiero a el look que armamos en base a él. Y por supuesto tener en consideración nuestro tipo de cuerpo.
En primer lugar en invierno la mejor opción es usarlo con booties o botines bien pegados al tobillo, taco pequeño e idealmente en punta.
Personalmente me encanta cómo se ven con botines negros estilo “calcetín” o bien pegados al tobillo
Por supuesto que si quieres usarlos con tus tacos o stilettos también es una opción. No obstante no es muy amigable para las bajas temperaturas, pero sí se ve 100% estilo.
Uno de los modelos más codiciados es el culotte en color camel. Sin duda una muy buena alternativa para salir del clásico negro y combina excelente con botas en los tonos, tal como es el estampado pitón que hoy es full tendencia.
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Asimismo, una excelente opción para usarlos para el trabajo es con blazers. Añaden la cuota justa de estilo y se ven muy bien con este pantalón.
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Sin duda una dupla ganadora y muy fácil de replicar.
Como van a poder ver a continuación estos pantalones quedan muy bien en los distintos tipos de cuerpo. Para aquellas mujeres con mucha cadera, el ancho de abajo ayuda a equilibrarla. Lo importante en este caso es llevar la prenda superior siempre por dentro para marcar algo de cintura.
Usarlos con abrigos largos le da un toque muy sofisticado y “fashionista”. Perfecto para el invierno.
