Limpio, práctico y suave. Sin duda el nuevo “must have” para las amantes de las líneas rectas y minimalistas.
En inglés se refieren a este tipo de vestido como slip dress. Yo en realidad no tengo tan claro un concepto para él en español, así que he decidido bautizarlo como el “vestido simple” por varias razones: Porque sus líneas son sencillas, porque te lo puedes poner simplemente levantando los brazos ya que por lo general no tiene cierres ni botones y porque sienta perfectamente sin necesidad de accesorios u otros complementos. También, porque sus finísimos tirantes dan la sensación de estar constantemente a punto de deslizarse por el hombro, y porque funciona prácticamente en cualquier situación. Algunas lo llaman también vestido lencero, no obstante este último se destaca por tener encaje en alguna de sus partes, en cambio el “slip dress” es más bien liso y predomina una sola tela en su confección.
Es uno de esos pocos vestidos que te dan una total sensación de libertad y te hacen sentirte increíblemente sexy – y ojo, ya que no son ajustados – pero la tela ligera y los tirantes delgaditos provocan que lo sientas como una “segunda piel”
Aquí te muestro una selección de mis favoritos, donde el primero color amarillo pastel es de MANGO y está actualmente en venta en todas las tiendas.
