Recuperación Post Parto: Los milagros no existen

Si bien es muy importante comprender que cada cuerpo tiene su ritmo de recuperación y que hay muchos factores que influyen, desde la genética hasta nuestro estado físico antes del embarazo, creo importante mencionar que si uno se cuida llevando una alimentación equilibrada y realizando algún tipo de deporte – que puede ser salir a caminar con el perro – podemos disfrutar de un mejor embarazo y por supuesto un mejor periodo post parto.

 

El embarazo no es el minuto de intentar rutinas de alto impacto en el gym o obsesionarse con el peso, sino de ser consiente de que un cuerpo sano es bienestar para ti y tu bebé

 

A su vez, estos beneficios repercuten directamente en el bebé, ya que éste se alimenta con los nutrientes esenciales y de buena forma. Mi hijo pesó casi 4 kilos (3.970 kg.) y midió 52 cm. y yo sólo aumenté 9 kilos…  Por tanto queda derribado el mito que mientras más peso subas, más grande va a ser tu guagua.

 

Por mi trabajo con Asesora de Imagen y Psicóloga, me toca ver muchas mamás recientes un poco complicadas con el tema del cambio del cuerpo. Efectivamente el cuerpo cambia, se adaptó por completó para acoger a un bebé durante 9 meses, por tanto lo primero que hay que indicar es que la recuperación toma su tiempo y los milagros no existen! Si tenías una buena rutina de deporte y alimentación, o el embarazo te pilló en un buen peso, lo más probable es que te recuperes pronto, pero cada cuerpo y organismo es único y requiere su propio tiempo, eso crucial que lo tengas en mente.

Además y lo más importante, no hay que estresarse!! Ya habrá tiempo para recuperar la figura y eliminar los kilos extra… Te lo aseguro que así será!

 

Ahora lo más importante es tu bebé que te necesita al 100% y que lo disfrutes al máximo ya que crecen muy rápido. Dar las gracias de tener a tu bebé en brazos y poder regalonearlo

 

Tal como mencioné en el post “Todos los Consejos para el Cuidado de la Mamá en el Postnatal”  ahí describo en detalle mi rutina de cuidados, alimentación, cremas específicas para el cuerpo, entre otras cosas… Pueden revisarlo y ahí tendrán marcas, qué productos usé, etc.

 

 

“Uno de los primeros consejos que puedo recomendarles a todas es no caer en la desesperación por volver al cuerpo que teníamos antes de quedar embarazada. Al contrario, disfruta esta nueva etapa de entrega a tu hijo y relájate ya que el tiempo es sabio y cada cuerpo tiene su propio tiempo y ritmo de recuperación”

 

 

Respecto a la recuperación de la figura después del parto hay que entender que influyen varios factores: Por un lado está la genética, que tiene un rol no menor ya que “pesa” más del 30% de la ecuación. Esto significa que juega un papel súper importante y de ahí que hayan chicas que comen mucho y no engordan, otras que comen muy poquito y suben de peso de inmediato, etc. Contra la genética no podemos hacer mucho, pero sí tenemos 2/3 restantes en los que sí podemos tomar cartas en el asunto. 

 

Estos 2/3 se componen principalmente entre el deporte y la alimentación. Y respecto a esto no se trata de ser deportistas de alto rendimiento ni entrenar todos los días de la semana. Sino de no llevar una vida sedentaria, privilegiar el caminar, subir las escaleras, andar en bicicleta y si te gusta el gimnasio, fantástico… La clave es estar en movimiento. 

Lo mismo con la comida… Más que hacer dietas estrictas o eliminar muchos alimentos, lo importante está en tener un estilo de vida saludable.

No se trata de no darnos gustos, al contrario. Creo que la vida es para  disfrutarla y no hay nada más rico que salir a comer y disfrutar un buen postre!!

Lo importante es comer lo más sano posible, privilegiar la comida casera, evitar las frituras y grasas malas; Legumbres, verduras, granos, tortillas, semillas, avena, granola, quinoa, yogurt griego, salmón, etc. Si haces deporte con regularidad y te alimentas bien siempre vas a mantener tu peso bajo control.  Ahh y olvídate del mito “comer por 2”. Yo sólo subí 9 kilos, alimentándome bien y mi última guagua (bebé) fue bastante grande! (3.970 kilos) por tanto queda demostrado que alimentándose sano contribuye en beneficios tanto para uno como para nuestro hijo.

 

“Hay que entender que la recuperación no es algo que sea de un día para otro, sino que es el reflejo de cómo nos cuidamos antes, durante y después de quedar embarazadas”

 

 

Personalmente he sido muy deportista toda mi vida y en este pasado embarazo nunca dejé de entrenar, a pesar de tener 2 hernias que me hicieron bajar mucho el ritmo y privilegiar sólo la actividad cardiovascular, hice deporte de manera activa hasta la semana 33.  Además no olviden, el cuerpo tiene memoria! Si el embarazo te pilló en buen estado físico y te alimentaste bien durante éste, sin duda te vas a recuperar muy pronto, tal como fue mi caso. Más aún si privilegias la lactancia materna que contribuye mucho a bajar los kilitos extra y contribuye a la contracción del útero, ya que produce un gasto energético de 500 calorías aprox. que son el equivalente a salir a correr casi una hora (a ritmo tranquilo). Ese elevado consumo de calorías, junto con una alimentación que no varíe mucho con respecto a la que se llevaba antes del parto (sólo un poco más), hace que uno vaya perdiendo peso poco a poco.

 

 

Por tanto…

 

Las claves de mi recuperación son simples:

Primero, llevo muchos años haciendo ejercicio con mucha intensidad, así que mi musculatura está muy desarrollada. Como el cuerpo tiene “memoria”, aunque durante el embarazo haya bajado la intensidad de ejercicios y ahora no lo practico en absoluto por motivos obvios (estoy dedicada al 100% de los cuidados de mi hijo), los músculos han ayudado a recuperar con más facilidad la forma anterior del cuerpo. Yo quedé embarazada estando en forma, bien en mi peso y subí 9 kilos, por tanto me fue fácil volver a como estaba antes.

Segundo,  estoy dando papa más de 8 veces al día, full libre demanda. Eso también contribuye a que las hormonas actúen sobre el útero que recobra su tamaño original con más rapidez y a la quema de calorías.

Tercero, sigo usando las cremas reafirmantes que he usado durante todo el embarazo y durante éste con regularidad me hacía drenajes linfáticos para evitar la acumulación de líquidos.

 

Si te cuidas antes, durante y después del embarazo, no tiene por qué cambiar tu cuerpo. Te recuperas con más o menos facilidad, dependiendo de varios factores como tu constitución, tus hábitos alimenticios, etc. Pero, es mejor hacerlo antes y después con más intensidad que durante el embarazo.

 

Finalmente:

“Sigan sintiéndose femeninas, dedícale mucho tiempo a tu guaguita, pero también a ti ya que de esa forma estarás mucho mejor para atender las necesidades de tu hijo y te sentirás mejor y más a gusto contigo misma”

 

Espero que estos consejos te sean de mucha utilidad. Un abrazo y que tengan todas un excelente comienzo de semana.

María Paz